"Pocas veces en la vida me he emocionado tanto. Cuando leían su biografía pensaba en un patriota, y soy de la época en la que estudiabamos la obra de los que lucharon por la patria", dijo. "Si existiesen más René todo sería más fácil. Este título es un regalo que me dio, no la profesión, sino una forma de vida, un pensamiento. Esto tiene que ver con mis sentimientos, no con mi carrera, por eso es el más importante reconocimiento", comentó.
"El gobierno, en vez de subvencionar fútbol y trenes que no funcionan, podrían hacer foco en obras como esta. No quiero hacer política, sólo soy una ciudadana que está harta". Frente al micrófono y tratando de controlar sus lágrimas, Susana sacó un papel de su bolsillo y dijo: "tuve el privilegio de conocerlo y la posibilidad de homenajearlo en vida. No es casualidad que este acto se haga hoy en un país que dista mucho de lo que él soñó". También contó que acababa de recorrer la fundación y se impresionó de los avances: "no hay nada que envidiarle a fundaciones de este tipo en los Estados Unidos u otras partes del mundo." Además sostuvo que Favaloro fue un patrionta, el ejemplo que la Argentina de hoy necesita desesperadamente.
"Se metió en la Argentina del no te metas. En tiempos de violencia hay que recordar su delantal blanco de médico rural como bandera de la paz", comentó. Susana recordó cuando René regresó de los Estados Unidos para curar y luchar en su país. Y deslizó: "René, tu vida y tu muerte no fueron en vano. Tengo buenas noticias para vos. Los argentinos que hacemos este país que soñaste seguimos siendo mayoría." Y anunció: "desde hoy como madrina y amiga tengo el compromiso de recordar que quienes negocian con la salud no deben omitir que la salud es un derecho humano, porque cuando se habla de eso se la excluye. Gracias,en mi vida he recibido premios del teatro y la televisión, algunos merecidos y otros no, pero nunca soñé que recibiría algo tan conmovedor como este".
